Los 5 beneficios de tener un negocio social
¿Tienes un negocio social? Te lo decimos, porque está demostrado que los negocios más responsables con su entorno crecen más rápido y consiguen más clientes. No es una estrategia al uso sino una actitud.
Es más, si prestamos atención a distintos informes recogidos, los clientes aceptan pagar un 10% más por el mismo producto si saben que está ligado a un negocio de tipo social. Así lo detalla el informe de «La Responsabilidad Social de la Empresa (RSC) y la racionalización de horario en el trabajo autónomo» realizado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). Ahí se explican las ventajas de emprender bajo este tipo de filosofía.
Negocio social, la nueva tendencia.
Los clientes cambian y eso hace cambiar a los negocios. En la actualidad, ya no basta con basar la estrategia en el producto, sino que los clientes tienen más exigencias y para ellos es importante conocer las condiciones bajo las cuales se desarrollan los productos y servicios. No se trata de montar un negocio rápido para vender y obtener beneficios, sino de seguir una filosofía que te permita diferenciarte y perdurar en el tiempo.
Que las nuevas empresas se fundamenten en la Responsabilidad Social Corporativa Empresarial (RSE o RSC) para que el entorno de trabajo sea menos conflictivo, es una forma de asegurar una cierta rentabilidad, atraer las inversiones, mejorar la imagen públicamente y animar a los consumidores a que compren ese producto.
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Sus beneficios son tan amplios que es importante que los nuevos negocios se respalden en esta filosofía y forma de hacer las cosas. Estas son algunas de las principales ventajas del negocio social:
- Puede reducir considerablemente los costes: realizando una serie de procesos que se fundamenten en la sostenibilidad y el ahorro de energía, se puede llegar a ahorrar mucho dinero. Por ejemplo, usando equipos con mayor eficiencia energética, eliminando el papel, etc.
- Atrae a inversores: los negocios sociales gustan a los inversores y los atrae, dado que pueden obtener más rentabilidades que los convencionales y eso implica más beneficio para los inversores.
- Atrae a mejor mano de obra: las empresas sostenibles gustan y son el futuro. Esto hace que los trabajadores prefieran apostar por ellas. Además, suelen funcionar mejor, lo que garantiza trabajo para muchos años y mejores salarios.
- Mejora la imagen: desde fuera, también mejora la imagen que los clientes puedan tener sobre el negocio. Esto hace que decidan probarlo o consumir en él.
- Las relaciones con los clientes son más estrechas: los negocios sostenibles y comprometidos con el cuidado del planeta y los valores sociales gustan a los clientes y eso hace que la relación sea más íntima que con empresas convencionales de toda la gusta. Eso gusta, porque fideliza casi sin querer. Mejora el compromiso.
Como ves, los negocios sociales son tendencia. Es un tipo de proyecto que funciona y que parece haber venido para quedarse. Al fin y al cabo, caminamos hacia una mejor forma de hacer las cosas y, sin duda, esta filosofía así lo promueve.
¿Qué opinas? ¿Tú también pagarías más si el negocio es social?
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